
Hoy vuelve a ser 17 de agosto, y toca echar la vista atrás. En primer lugar, a aquella tarde de 2016 en que este blog comenzó a dar sus primeros pasos. Después, a los años 2017 y 2018, en que celebrábamos los respectivos cumple blog. Y, como en aquellas ocasiones, han vuelto a transcurrir 365 días y hoy estamos nuevamente de celebración: ¡Con botas y mochila cumple 3 añitos!.
Aunque, más que añitos, podríamos decir añazos. Porque sí, por que los está cumpliendo muy bien y se está haciendo mayor muy rápidamente.
Este último año ha conllevado algunos cambios; el más importante ha sido el migrar (de manera autodidacta y, casi milagrosamente, sin fallos graves) el blog desde Blogger hasta WordPress. Fueron unos días de estrés y aprendizaje forzoso pero que, tal y como hemos comprobado después, merecieron mucho la pena. Este blog ahora queda mucho más ordenado, limpio y agradable. ¿No os parece?

Quizá ello haya permitido que, tras el bajón de visitas en los días de migración y posteriores, el blog no haya parado de crecer en los últimos meses.
Como tampoco deja de crecer en las redes sociales. Ya somos más de 2450 en Facebook, unos 3400 en Twitter y más de 12700 en Instagram; ¡cómo crece la familia de Con botas y mochila!
Pero, sin duda, lo que también ha crecido (y lo que más nos enorgullece) han sido los constantes comentarios en el blog, correos electrónicos, mensajes privados e, incluso, conversaciones en persona en las que algunos de vosotros nos habéis preguntado por vuestro próximo viaje, nos habéis dado algún consejillo o, simplemente, habéis comentado que alguna entrada del blog os había sido útil.
¡Gracias! Todo ello, precisamente, es lo que nos anima a seguir todavía con más ganas.
Y, ya sabéis, si queréis acompañarnos, seguiremos caminando, paso a paso, Con botas y mochila.
¡Un abrazo a tod@s!
